Oración a San Antonio de Padua para pedir por un imposible
San Antonio de Padua, llamado el santo de todo el mundo, doctor de la iglesia y patrono de los pobres, muchos son los que te honran y te invocan, como el patrón de los casos imposibles y de las causas desesperadas.
Siempre das lugar a las plegarias de tus fieles con tu misericordioso corazón. Bendito San Antonio, glorioso, admirable y gentil, tu amor por Dios, tu caridad por sus criaturas y tu afán por auxiliar a todos cuando estabas aquí en la tierra, te hicieron merecedor del don de los poderes milagrosos.
Los milagros son los que te han dado la vida. Me esperaban tu palabra y tú estabas siempre dispuesto a pedir por todos aquellos y hacer lo que no estaba al alcance de un simple humano. Por tu gran don de otorgar lo que se te pide, vengo ante ti con un corazón sediento de tu piedad para que puedas ayudarme ante esta situación que para mí es imposible, pero que tú podrás darle un fin adecuado.
Bendito San Antonio de Padua, llamado el santo de todo el mundo, doctor de la iglesia y patrono de los pobres, ruega por mí, San Antonio. Me siento tan impotente y solo.
Consígueme ayuda visible y rápida. Ven pronto en mi auxilio, en este momento de gran tribulación que aflige a mi alma, para que pueda recibir el consuelo y la ayuda del cielo.
Da fín a todas mis necesidades, pruebas y sufrimientos, particularmente en esta oración. Y que pueda alabar a Dios contigo por siempre. Puedes expresar lo que deseas pedirle. Ven en mi ayuda, alcánzame lo que humildemente te pido, para que puedas siempre, con todo mi ser y todo mi corazón, bendecir y alabar a Dios contigo y con todos los escogidos por todos. Y que pueda alabar a Dios contigo y con toda la eternidad.
Te prometo, glorioso San Antonio de Padua, acordarme siempre de este gran favor, y nunca dejaré de honrarte como mi especial y poderoso protector, y hacer todo lo que pueda para fomentar tu devoción.
Eres mi ejemplo de fe y esperanza, generoso en caridad. A ti te suplico, que escuches mi voz, y que me escuches. Eres mi oración, desde el cielo, donde te encuentras con el Padre, hazme llegar protección y auxilio que necesito en este momento, en que mis fuerzas flaquean. Intercede por mí, y alcánzame la gracia que te pido.
Venerable San Antonio, ilustre por tantos milagros, ruega por mí. No me abandones. Jamás dejes de mirarme. Enviarme tu luz de esperanza sobre mí y mi familia.
Aparta de mí las tentaciones. Dale paz a mi alma, y bendice mi hogar. Te prometo, bendito San Antonio, que siendo siempre consciente de este gran favor que me alcanzarás, siempre te honraré como mi poderoso patrono especial. ¿Tú qué dijiste? Si predicas a Jesús, Él ablanda los corazones duros.
Si lo invocas, endulza las tentaciones amargas. Si piensas en Él, te ilumina el corazón. Si lo lees, te sacia la mente.
Ayúdame a que toda mi vida sea a su alrededor. Que no haya lugar en mi mente, más que para mí. Que no haya lugar en mi mente, más que para Él. Que sólo lea sus enseñanzas. Que mi alma posea una gran inmantación hacia su divinidad, apartando los deseos mundanos.
Déjame prevalecer sólo ante su majestuosidad. Que sólo a Él busque. Y que tú, San Antonio de Padua, sea el puente entre mi vanidad, y su santidad.
Patrono de los casos imposibles, bendito y glorioso San Antonio, consuela mi alma al saber que me escuchas y que intercederás para que estos problemas que hoy llaman a mi puerta se marchen prontamente.
Déjame saber que estás aquí, a mi lado, siendo mi sostén, y mi guía. No permitas que la duda o el temor me arrebaten, que pueda depositar mi corazón a los pies del Señor, sabiendo que tú me ayudarás, porque creo en el poder que Dios te confirió, porque confío en tu mediación, San Antonio, hoy me entrego a tu amor. Gentil y querido San Antonio, cuyo corazón siempre está lleno de compasión y ternura humana.
Susurra mi petición a los oídos del dulce niño Jesús, a quien le gustaba en sobremanera estar entre tus dulces brazos. Por favor, te lo suplico, no me dejes sin respuesta, yo te rezaré con fervor, y por siempre tendrás la gratitud.
Amén.
Oración a san Antonio de Padua para que regrese el ser amado
Oración a San Antonio de Padua para que tu expareja vuelva arrepentido o arrepentida. Encomiéndate al milagroso San Antonio de Padua con esta bella oración para que tu expareja o tu persona especial vuelva arrepentido o arrepentida a ti.
Pide ayuda a San Antonio de Padua con mucha fe, con humildad y con la esperanza de que tu plegaria se verá hecha realidad, y esa persona que se fue y se portó mal contigo volverá a tu lado con arrepentimiento y sinceridad.
Reza la oración tres veces seguidas durante siete días consecutivos sin interrumpir. El séptimo día, al terminar de rezar la oración, puedes encender una vela blanca o rosada en nombre de San Antonio de Padua para agradecer y darle más fuerza a tu plegaria.
Es conveniente rezar la oración en completa soledad.
Comenzamos.
Hermoso y bienaventurado San Antonio de Padua, a ti venimos a rogar cuando nos encontramos sin salida.
A ti acudimos a suplicar cuando la angustia se apodera de nuestros corazones.
A ti vengo hoy a clamar mi dolor, mi anhelo y mi necesidad.
Otórgame este favor que tanta falta me hace. Te pido, San Antonio bendito, que traigas a mi lado a… Di su nombre completo.
Que venga con arrepentimiento, sintiendo de corazón el error que ha cometido. Que venga a mí sumiso o sumisa, para entregarme a mí todo el amor de su corazón.
Adorado San Antonio de Padua, me doy a ti en cuerpo y alma. Confío plenamente en tu bienhacer. En tu poderosa divinidad. Y en tu caridad cristiana.
Haz el milagro para que… Di su nombre completo. Se arrepienta de sus actos. Rectifique sus errores. Y venga a mi lado suplicando el perdón.
Amado San Antonio de Padua, repartes amor por el mundo entero. Nos salvas de caer en la tentación, en el pecado y en la sin razón. Por eso acudo humildemente ante ti, esperando en ti. Para encontrar nuestra salvación.
Vela por nosotros San Antonio de Padua.
Vela por nuestra unión sagrada de amor.
Vela por siempre por nuestra felicidad juntos.
San Antonio de Padua, protector de nuestro Señor. Toca el corazón de… Di su nombre completo. Y apacígualo. Endúlzalo.
Para que sólo el amor tenga cabida en su corazón. Domina su orgullo. Y a las fieras que le impiden buscarme. Hazle entrar en razón.
Que nuestro amor tenga aún salvación. Dejo en ti esta plegaria con la certeza de que sabrás otorgarla. Gracias bendito San Antonio de Padua. Amén.
Reza la oración tres veces seguidas durante siete días consecutivos sin interrumpir. El séptimo día, al terminar de rezar la oración, puedes encender una vela blanca. O rosada en nombre de San Antonio de Padua para agradecer y darle más fuerza a tu plegaria.
Que la bendición y la protección de San Antonio de Padua esté siempre contigo y te ilumine en el amor.